Carta abierta a un adolescente

18.08.2010

Si tienes entre 15 y 25 años, tu mamá no va a la pelu una vez por semana, tu papá no juega al padle, y ni tú ni tus hermanos prometéis como gladiadores jugadores de fútbol, haz del favor de seguir leyendo lo que la Organización Internacional del Trabajo dice de tí, porque Dios no existe -o no da señales de vida- y rezar no te servirá de mucho. A lo mejor te sirve de consuelo, pero para eso el whisky, el sexo, y el suicidio han demostrado ser más eficaces. Claro que la Iglesia te dirá que no, pero tú ni caso, es que no les gusta la competencia.

Te decía que estos señores han estado un tiempo en el rincón de pensar y han sacado un informe que dice algunas cosas sobre tu oscuro presente y tu negro futuro. Puedes encontrar un resumen en el blog de Àngels, y si tienes 15 minutos puedes echarle un vistazo al informe original.

La buena noticia es que la solución es fácil porque la conocemos conscientemente desde que un filósofo con barba analizó sesudamente el transcurso de la historia y concluyó que el mundo se divide en explotados y explotadores y que la lucha entre ellos es el motor de la historia. Como con la paga de tus padres o el trabajillo de verano no habrás reunido capital -dinero- suficiente como para comprar el esfuerzo de tus amigos y forrarte fabricando camisetas de Enjuto Mojamuto, no te queda más remedio que engrosar las filas de los explotados. Si te sirve de consuelo, estás con la mayoría. En realidad es algo más complejo que eso, pero para el asunto que nos conscierne este prisma, esta perspectiva, del mundo ha demostrado ser una herramienta muy útil para entender muchas cosas como las que están pasando estos días. Para actualizar lo que decía el barbudo puedes empezar a leer qué es el FMI, el Banco Mundial, Emilio Botín, la familia Polanco, la especulación financiera, la guerras del petróleo, las maquilas, la constitución Española, la de la Segunda República, el Estatuto de los Trabajadores y la flexiseguridad.

La mala noticia es que la práctica es más puñetera. Has nacido en una época donde la gente ya ha olvidado lo que decía el barbas -en realidad han sido los explotadores, que son los que tienen las teles para engañar a la gente- y salvo algunos pocos cabezones, el resto se ha tragado el cuento o está confundido. Los del lado de los explotadores nos han tendido una trampa que se llama sociedad de consumo, "un peligroso envase lleno de nada que permite suprimir las necesidades reales mediante la oportuna imposición de necesidades artificiales". ¿Te acuerdas cuando durante unos meses fuiste el único de la clase que no tenía la Play Station III, hasta que tus padres, para no traumatizarte, te la acabaron comprando? Pues eso.

Que no te engañen los tertulianos de la tele cuando dicen, como curas hablando de matrimonio, que en España no hay espíritu emprendedor y que todos quieren ser funcionarios. Ojalá fuera tan sencillo. Emprendedor es un eufemismo, una palabra vieja con una acepción nueva que significa ¨obrero sin capital que busca capitalistas¨. Y es bueno, claro, sobretodo si tienes una idea buena que vaya a desembocar en algo útil para la sociedad, y tanto mejor si, siendo de la minoría que prospera, creas una empresa justa con sus trabajadores. Será la panacea si lo que montas tiene forma de cooperativa. Pero la falta de esperítu emprendedor no explica que estemos como estamos, con cuatro veces más paro entre los jóvenes españoles que entre nuestros vecinos. Se habla mucho de Estados Unidos y su Sillicon Valley, y se pone el acento en la cultura americana. Si bien es cierto que los yankees son para estas cosas algo más lanzados que nosotros -algunos dicen que por la ética protestante de sus primeros pobladores-, lo que no se dice tanto es que en EEUU hay muchísimo capital buscando el mejor sitio donde invertir. Ese capital existe por muchas razones, pero una de las gordas son las guerras que se generan en la otra punta del mundo. Es de esa manera, expoliando -robando- los recursos de los países pobres, como los capitalistas del primer mundo consiguen el dinero para que su rueda siga girando. Por eso gastan más dinero en ejércitos que en tiempos de la guerra fría. Como EEUU es un país imperialista, puede permitirse esos lujos. Pero claro, no es muy ético.

En definitiva, que las teles cada vez son más planas y los ordenadores más rápidos, pero por este frente la cosa está cada vez peor y nos están quitando lo que a nuestros predecesores -quizás a tus padres o a tus abuelos- les costó sudor, lágrimas, fosas y entierros. Como puedes ver hay mucho camino por recorrer, así que si no te gusta que se rían de tí más vale que vayas despidiéndote del individualismo y pensando a qué sindicato y/o partido y/o colectivo organizado alistarte, por solidaridad, por cabezonería, por contestacionismo, o por dignidad, porque esto es la guerra y más vale perder de pie que humillarse arrodillado.